



Tunjo muisca
Dibujo de alambre con ajuar de espirales, argollas y retazos.
Tosco, chueco, sin brillo: íntimo habitante del fondo de lagunas.
Óxido de cobre y oro emparejado por siglos.
Caben en la mano.
Hacer tunjos
EXALTACIÓN DE LA MATERIA Y EL OFICIO ARTESANAL
Los tunjos no se premeditan, no se copian, no se repiten. La estética del metal no se sacrifica al cuento: lo doblega .
Los tunjos acogen accidentes (la Balsa Muisca carece de un extremo y natas de metal, filtraciones de un molde averiado, velan parcialmente el dibujo).
El trabajo desacralizado, energía pura medible en horas (Mircea Eliade), la división del trabajo y el utilitarismo moderno hacen pensar el oficio precolombino como técnica y los tunjos como obra estandarizada de especialistas, producidos masivamente a la ligera para ser dejados en lagunas y cuevas.
Pero, tal vez, en el mundo muisca los relatos surgían directamente del oficio, de la cera de abejas y de la tumbaga. No había relatos sobre relatos y la materia suministraba dioses: la cara de los dioses eran antojos de la materia.
Los rudimentarios tunjos nacían de una labor casera de modelado de cera llevada a cabo por gente común no profesional: los muiscas modelaban figuritas de cera en sus viviendas. Tal vez.
Los tunjos no se degradaban en detalles ornamentales superfluos, la minuciosidad no agregaba importancia a los tunjos, que eran fábulas de efecto desconocido, cuyo sentido escapa al hombre, traducibles de mil maneras. Afán de hacer tangible lo inefable.
Textura: huella que deja una mano ocupada en otra cosa.
Accidente: acontecimiento del que somos intermediarios; supera ocurrencias logradas con esfuerzo. Varían la obra con gracia, sincerando el trabajo
La calidad plástica se da por añadidura, como en los dibujos de los niños.
Remiendo: estética de lo precario, del apego. Vence pretensiones, prevalece. Preservación del alma, no de la apariencia. Privilegio de la obra en la carencia.
Oficio: búsqueda de excelencia, no de originalidad.
La obra física, los objetos creados, deben dar cuenta de sí mismos, hablar. Existen cada vez que nos acercamos a ellos, independientemente de la intención de autor: no los mejora otro relato.
La tierra tiene lo que tú levantas de la tierra. Nada más tiene.
Todo lo creado, sólo es lo que tú puedes crear con todo lo creado.
Lo que haces no es lo que crees que haces.
Tus manos, ya casi sin tierra. Pronto no se verán tus manos.
Damos un nombre y luego no sabemos qué nombre darle al nombre.
Quien dice la verdad, casi no dice nada.
PORCHIA, Antonio. Voces, Hachette Buenos Aires 1973.
Creo que se piensa más sanamente cuando las ideas surgen del contacto directo con las cosas que cuando se miran las cosas con el fin de encontrar tal o cual idea.
VAN GOGH, Vincent. Cartas a Theo, Barral Editores Barcelona 1972. Pag. 88
He sospechado muchas veces que el significado es, en realidad, algo que se le añade al poema. Sé a ciencia cierta que sentimos la belleza de un poema antes incluso de empezar a pensar en el significado. BORGES, Jorge Luis. Arte poética, conferencias Norton 1963. Editorial Crítica, 2000.
"Tengo para mí que la belleza es una sensación física, algo que sentimos con todo el cuerpo. No es el resultado de un juicio, no llegamos a ella por medio de reglas; sentimos la belleza o no la sentimos"
BORGES, Siete Noches (1980). Quinta conferencia.
Leves precarios inescrutables tunjos
“Los tunjos, representaciones de variados personajes, así como los numerosos objetos pequeños que ilustran elementos de la vida diaria y los animales relacionados con su mitología, como serpientes, aves, ¨dragones¨, constituían las ofrendas que los muiscas depositaban en templos y santuarios comunales por intermedio de los sacerdotes”.
FALCHETTI, Ana María. Boletín del Museo del Oro, enero 1980.
“...Sin embargo, es probable que el significado de la ofrenda de los tunjos muiscas no fuera tan simple. Nuestra teoría actual no explica, por ejemplo, por qué siempre debían ofrecerse por pares... parte de los mecanismos utilizados por los hombres para mantener el equilibrio del mundo...; las ofrendas de los diferentes tipos de tunjos tendrían la función de agregar tal o cual principio a sitios específicos de la tierra, de los templos, de las lagunas o incluso de las viviendas....”.
LLERAS PÉREZ, Roberto. Las estructuras de pensamiento dual en el ámbito de las sociedades indígenas de los Andes Orientales, Museo del Oro, Boletín 40, Bogotá, 1996.
“...Tanto estos aspectos generales de la sociedad muisca, como el significado de los tunjos, se han inferido a partir de las crónicas y los archivos de la conquista; desde allí se ha intentado reconstruir la vida de los muiscas y el significado y función de su cultura material..... Enfrentamos entonces la dificultad de estudiar sociedades indígenas que no se describieron a sí mismas y que sólo podemos conocer a través de los ojos de otra cultura....Los tunjos han sido considerados por los/las investigadores/as de la cultura muisca como figuras “votivas” o “ex-votos”, es decir, objetos elaborados para ser ofrendados a los dioses... asociados a peticiones...Esta manera de describir los tunjos manifiesta un modo peculiar de interpretar un hecho desde una noción occidental católica de lo que significa para un feligrés un objeto “votivo” o un “exvoto”, entendido como la ofrenda de un objeto ya sea en acción de gracias por un favor obtenido de Dios, la Virgen o algún santo, o bien como voto o promesa.... criterio etnocentrista que asumen la mayor parte de los/las investigadores/as.”
CASTRO SÁNCHEZ, Ana María. El género como expresión simbólica. Un estudio iconográfico sobre los tunjos muiscas. Museo del Oro, Boletín 53, Bogotá, 2005.
“Existen pocos estudios originales sobre la religión muisca y sus manifestaciones, ya que la mayoría de ellos es apenas una transcripción de las crónicas, sin siquiera una crítica textual a las intromisiones y adiciones de los cronistas a los posibles discursos muiscas.”
ROZO GAUTA, José. Mito y Rito entre los muiscas, Introducción, El Búho, Bogotá, 1997.
“...[los españoles] hacían de los mitos y tradiciones novelas sentimentales. Es frecuente que el fervor religioso o la mala interpretación haya querido encontrar en la antigua historia indígena rastros de la creencia cristiana, y que la adornara, agregándole arbitrariamente diferentes ideas cristianas. Hay cuentos y leyendas que no son más que una parte del catecismo romano que llevan intercalados los nombres de los dioses paganos…”
KRICKEBERG, Walter. Mitos y leyendas de los aztecas, incas, mayas y muiscas, Fondo de Cultura Económica, México, 1971.
"Esto hacen ellos con ciertas hierbas, y es tan grande secreto, que cualquiera de los plateros de Europa, o de otra parte donde entre cristianos se usase e supiese, se ternía por riquísimo hombre, y en breve lo sería con esa manera de dorar [..]. Yo he visto la hierba, e indios me la han enseñado, pero nunca pude, por halagos ni otra forma, sacar dellos el secreto, e negaban que ellos lo hacían, sino en otras tierras muy lejos, señalando al Sur o parte meridional” FERNÁNDEZ DE OVIEDO, 1585.
Tomado de AMÉRICA Y LA ESPAÑA DEL SIGLO XVI Tomo I página 279. C.S.I.C. Instituto Fernández de Oviedo, Madrid 1982.
El comerciante Pedro de Cifuentes se lamentaba de la orfebrería indígena, de lo trabajoso que era fundir esa obra:
“Las partes huecas están llenas con una tierra muy pesada...y hay tan poco oro puesto encima de ellas que casi la mitad consiste de tierra, especialmente en los animales y aves que ellos fabrican.”
WARWICK, Bray. Oro de El Dorado, Ed. La Rosa, Bogotá, 1985
"...respetaban a otras deidades relacionadas, no con la idea abstractaa de un dios celestial, sino con "las cosas de acá abajo/ el cual/... les da de frutas y salud. ... dioses de acá abajo, que permanentemente incidían en los aspectos cotidianos de su vida" y "Para todas las cosas que en la tierra había tenían un ídolo."
LANGEBAEK Carl, Citas en Las ofrendas en los Andes Septentrionales de influencia chibcha. Boletín Museo del Oro Nro. 16, Bogotá, 1986.
MODELADO: configuración a mano de una pieza única de cera.
FUNDICIÓN A LA CERA PERDIDA: a) se elabora el molde de una pieza de cera, revistiéndola de arcilla. b) se “pierde” la cera haciéndola escurrir por calentamiento. c) La cavidad libre se llena con metal fundido.
TUMBAGA: aleación precolombina de mucho cobre y poco oro. Facilitaba la fundición (menor punto de fusión que el del oro y el cobre por separado); posibilitaba el dorado por eliminación del cobre superficial.
APLIQUE: técnica que consiste en pegar cualquier pieza, ornamental o de configuración, sobre una superficie. Los tunjos muiscas son apliques de hilos y retazos sobre un fundamento triangular, de cera.

...la idea de que las palabras fueron mágicas en un principio y son devueltas a la magia por la poesía, es, creo, verdadera.
BORGES, Jorge Luis, Arte Poética, Pensamiento y poesía. Austral, 2012.
La idea de que las cosas fueron tunjos en un principio...